lunes, 22 de diciembre de 2008

I Festival Revolta Sonora

Sábado 20 de diciembre, 20:00 de la tarde. En la sala Nave8 de Sant Vicent se inauguraba un nuevo festival con un cartel más que aceptable. Los típicos de la zona como Mugroman y l'Olla Express (que por cierto, no defraudaron nada) y a continuación los platos fuertes, que eran la Kinky Beat y Disidencia. Y la entrada a 15 euros era un precio aceptable.
La verdad es que prometía y al principio todo cumplió con las expectativas. L'Olla Express es un grupo que ha mejorado muchísimo desde que comenzó. Su música de mestizaje hace imposible que alguien dentro de la sala esté quieto. Sus conciertos cada vez están más trabajados y sus ritmos, todos muy movidos y variables, pasando de lo lento a lo rápido, del reggae al ska e incluso con finales de punk para que el público se mueva aún mucho más. Alicante no ha visto nacer a muchos grupos de este estilo y contar con l'Olla Express como grupo casi fijo en los carteles de los próximos festivales alicantinos es todo un seguro de que lo pasaremos bien. La página del grupo, www.ollaexpress.com tiene a disposición de quien quiera el primer trabajo de este grupo alicantino para descargarlo. Es muy recomendable.
A continuación vino la Kinky Beat y con ellos seguramente el mejor momento de la noche, cuando la sala más se llenó y cuando el público más bailaba. No calculé las horas que dieron de concierto pero estuvieron un buen rato moviendo a la gente sin parar, con su estilo de mestizaje que tanto gusta a distinto tipo de gente y con esos ritmos de fondo que a veces llegan a recordar a las raves. Distintas canciones durante la actuación y las más esperadas las dejaron para el final del concierto, haciendo de él una auténtica fiesta. Eso ocurrió gracias a canciones como 'Maria Maria', 'Itaka Berriro' (versión de Fermín Muguruza), 'No es lo mismo', 'Rebel Smile' o 'Karate Beat'. Cada vez que este grupo viene a Alicante tienen más éxito y han conseguido hacerse un hueco importante en el panorama musical alternativo estatal.
Por último, llegó Disidencia, el grupo al que yo personalmente más esperaba. No se si el resto de la sala pensaba como yo. Pero todos coincidieron en que los de Onil habían decepcionado de muy mala manera. He visto a Disidencia en todas sus etapas: con Maki a la batería, poco antes de que Maki se fuese, sin Maki... y claro está que han tenido mejores y peores épocas. Pero lo del concierto de este sábado nunca lo había visto. Si me llegan a decir que Txus no canta y que era otro me lo habría creido. A su voz le faltaban ganas (como a todo el grupo) y desgarro. Los punteos del Jipi (uno de los puntos fuertes del grupo) a penas se escuchaban. De la batería no se puede decir mucho. Claro está que con Maki funcionaba mejor pero tampoco se le puede culpar al componente nuevo, si los antiguos son los primeros que no ponen las ganas sobre el escenario. Sus canciones eran lentas, las más rápidas sonaban al mismo ritmo que como las habían grabado en LP en su día. En un concierto se quiere ver rapidez, ganas y temas clásicos. Disidencia no puso ninguna de las tres cosas. Por si fuera poco, no solo nos dejaron con las ganas por su lentitud y su desánimo. Es que además tocaron todas (o casi todas) las canciones de su último disco (Antología Poética), que, aunque tiene buenas canciones, es con toda seguridad el peor álbum que hasta ahora han sacado y la gente va a ver a este grupo para escuchar más canciones antiguas. 'Martes 13', 'El Mitin', 'La solución está en tus manos', 'Me quema la sangre', 'Amor de WC', 'Que deje de ser una utopía', 'Hust Ville', 'Prefiero Caminar'... cantidad de canciones que no sonaron. Si que lo hicieron 'Carne de Obra', 'Pásame la priva', 'Apología de lo evidente', 'A Contracorriente' y alguna más.
Lo que tampoco me entra en la cabeza es el tema escogido por Disidencia para cerrar sus conciertos: 'A todos ellos'. Una de las canciones de su LP 'Bienvenidos a Occidente' que la verdad, puede gustar o no, pero desde luego no es de sus mejores canciones. Pero así lo han elegido y parece que nada les hace cambiar.
Siempre he sentido un gusto especial por Disidencia y lo he tenido como un grupo superior a los demás, si tuviera que quedarme con tres bandas, ellos serían una y ahora lo seguirían siendo por todo lo que han dado a lo largo de su carrera. Pero si el último LP supuso un pequeño bajón en su calidad o estilo musical, su último directo ha sido un gran descenso. Esperemos que la cosa cambie.
Aún así, gran festival el Revolta Sonora, ojalá sea la primera de muchas ediciones y que los conciertos en Alicante sigan adelante.

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